Un poco de historia .. el Té
Según la leyenda china, esta interesante historia comienza cuando el emperador y erudito ShenNung, descubrió las propiedades beneficiosas del té. Una de sus sabias normas fue la disposición de que durante su reinado, toda el agua destinada para el consumo humano fuese previamente hervida.
Cuentan que un día del año 2737 a.c. cuando Shen Nung estaba descansando junto a un árbol de té silvestre, una ligera brisa agitó las ramas con tan buena fortuna que algunas hojas fueron a caer en el agua que estaba hirviendo. La infusión resultante le pareció deliciosamente refrescante y reconstituyente, y así fue como descubrió el té.
Los japoneses nunca fueron muy devotos de la leyenda del origen del té de Shen-Nung de China. Para ellos, los secretos místicos del té fueron llevados en el año 520 desde la India a China por un monje budista llamado Bodhidharma, quien había estado siete años sin dormir contemplando a Buda.
Después de tan duro esfuerzo, el piadoso monje comenzó a sentirse soñoliento. Desesperado cortó sus párpados y los arrojó al suelo. Un día después, en ese lugar, una pequeña y bella planta había brotado. Al masticar sus hojas experimentó una agradable sensación y comprobó, fascinado, que su sueño cedía lentamente.
Otra leyenda cuenta que la aparición del té en Japón se debe al monje budista Dendgyo Daishi quien, después de un peregrinaje por China, llevó semillas de la plata del té a su pequeño monasterio.
Cuando las plantas crecieron Dengyo Daishi le llevo hojas de té al emperador y lo inició en su preparación. Encantado con las delicias de este brebaje, el emperador ordenó plantar té en cinco regiones cercanas a Kioto, que era entonces la capital de Japón.
Entre los siglos IX y XI, las relaciones chino-japonesas se habían deteriorado de tal manera que el té, un producto chino, dejó de ser consumido en la corte japonesa. Con el correr de los siglos, los japoneses volvieron a consumir té y desarrollaron una compleja e insuperable ceremonia: la sagrada ceremonia de té o Cha-no-yu, una de las costumbres más famosas de la cultura japonesa.
Nota: En estado silvestre, el árbol del té puede alcanzar de 10 a 15 metros, si bien en las plantaciones se podan los arbustos para facilitar la selección de sus hojas a los recolectores que recogen los brotes más tierno, lo que repercute en la calidad final del té.
El té es como un buen vino. El gusto y la calidad del producto final dependen de un compendio de factores: el clima, el suelo, la altitud, las condiciones climatológicas, el método de recogida, su manipulación, mezclas, embalajes, transporte y conservación.
He dejado de fumar y me he aficionado al buen té, no al del supermercado ... Estoy aprendiendo mucho.
Ya os contaré sobre sus propiedades ... Nos vemos!!
Casadelte.com/lahistoria
zonezero.com/exposiciones/fotografos/wasif.
China en fotos.
18 comentarios:
Soy de café, pero aprenderé contigo a tomar un buen té.
Un saludo.
Hola amiga!
Me encanta el té, tengo un compañero de trabajo que es un mago preparando té. Buenísimos todos.
Feliz día
Me gusta mucho el te, y ahora que lo hay de diversos gustos, mejor.. Eso si, tambien me quitael sueño como el cafe que tambien me gusta mucho. Historias interesantes sobre el te, no las conocia, gracias por compartirlas . Besitos
Gracias por la información amiga, el mundo del te es muy amplio y hay para todos los gustos
Saludos
Me encanta el té y con toda esta info que nos has traido ahora ya me parece un ritual ;)
Gracias y besos.
Arwen
El de Bergamota mi favorito.
Me fascina el ritual del té. Y ponerme el kimono. ;)
Besiisss
A mí me gusta el té aromatizado con frutas, especias... Y claro, también dónde esté un buen té con hierbabuena... Aunque, eso sí, teniendo en cuenta que su contenido en cafeína es bastante menor que el del café.
No me gusta, lo mío es el café.
Sería interesante que investigaras las propiedades en sus diferentes presentaciones, sé del té blanco, rojo, verde, mi preferido el verde con sabor a berries.
Un beso.
¿Un poco? para mi es mucho, gracias por toda esta información.
Sau2
Con lo que daría yo por que me gustara...
Y no hay manera.
Con lo que disfruto con todo lo que tu cuentas ...
En fin, no será porque no lo he intentado veces.
Un abrazo Balo
Genial como siempre
;)
Mmmmmm...¡buenísimo!
Hola Balovega¡¡
¿puedes creer que jamás probé el té? pues asi es ;(. Después de leerte creo que mañana sorprenderé a la chica de la cafetería con otra petición ;)
Un besote
¡Que no me llamo "Javier", me llamo "Felix", jajaja, en que estarías pensando¡
A mi me da mucha envidia la gente que toma té. Se nota que disfrutan. Y me encanta cómo huelen algunos tés. Pero soy incapaz de tomar uno, es que lo del agua caliente con hierbajos no es lo mío. En general, las bebidas calientes no son mi fuerte.
Besucos.
Interesante artículo.
Un abrazo Balo.
Discúlpame por no poder acudir más por tu blog, pero etoy muy liado con el final de curso de Silvia y los examenes que hacemos
Manuel
Hace algún tiempo hice una pequeña introducción sobre el Té, fue un pequeño experimento, un ejercicio.
http://jonkepa.wordpress.com/2008/11/19/%E8%8C%B6-el-te/
Saludos.
Interesante la historia del té. Mira yo aquí en Las Palmas, lo compro al peso en una tienda que se llama "Planeta Vivo" (que está en el Centro comercial las Arenas). Está super bueno y te lo ponen en una bolsita super chula de color vino y brillante con una lazada dorada y por fuera te pegan la etiqueta. Yo últimamente me he aficionado al rooibos ¡está buenísimo! lo que pasa es que es un te que no contiene teína y te ayuda a conciliar el sueño y relajarte. Lo hay con aromas a yogur, chocolate, canela, limón... Te animo a que lo pruebes, además las propiedades del rooibos son muchísimas. Bueno hasta la próxima y saludos.
Publicar un comentario