El Otoño ha llegado sin retraso, hacia tiempo que la estación otoñal no era cumplidora de horarios, sin embargo no ha querido esperar para saludarnos. Ha llegado a la ciudad dejando sus gotas como lágrimas que caen tímidamente en algunos de nuestros barrios, preguntándose.. seré bien recibida?. Sin embargo en otras zonas urbanas se ha transformado, y llena de rabia ha descargando sus ráfagas de lluvia, rayos y truenos sin dar tregua a los más desvalidos, queriendo hacer notar su poderío como si fuese una estrella que entra en los hogares diciendo.. "Aquí estoy... soy el Otoño."

Unos lo reciben con pesar, y tristemente piensan con añoranza en el verano que se marchó, quedándose débiles e indefensos. Otros lo acogen disgustados por tener que sustituir el vestuario ligero por ropa de abrigo, recordando a la vez el amor que dejaron en algún lugar, y que quizá nunca volverán a ver.

En cambio los hay que sin pensar en despropósitos, son felices simplemente por ver las estelares alteraciones que acontecen en ésta estación del año, donde los cambios son infinitos, los días se acortan y aumentan las noches en vela. Los árboles parecen adormecerse, y sus hojas verdes cambian su color se vuelven amarillas, pasando por el ocre y llegando al carmelitoso, un color pardo que parece encontrarse en soledad. Y ahí, en ese momento es cuando las hojas pierden el equilibrio y poco a poco van deslizándose de los árboles para caer ayudadas por el viento, en el frío y húmedo suelo cubriéndolo como un manto a nuestros pies.

1 Foto: Parque del Oeste - subida en es.Madrid por Balo.
2 Foto: Parque del Capricho - subida en es.Madrid por Druida.
Vídeo prestado por YouTube y realizado por Carmen 2007. Balada de Otoño de Joan M. Serrat..
Escrito por Balo.